Natalie es miembro del equipo de Marina Plastic Surgery. Es asistente del Director Charlie Sheridan, y también actúa como Defensora y Coordinadora de Pacientes. Natalie se realizó un aumento de senos y un levantamiento de senos con el Stevens Laser Bra por el Dr. Stevens a finales de 2006. Dada su pasión por trabajar con pacientes, está ansiosa por compartir algunas de sus experiencias contigo.
Aunque soy joven, mis senos necesitaban ser levantados. Son algo grandes y ya habían empezado a caerse con los años, así que sabía que podía beneficiarme de un levantamiento de senos. También quería que mis senos tuvieran más volumen en la parte superior. Me frustraba que, aunque tenía senos grandes, no tenía escote.
Tenía los mismos miedos sobre la cirugía que algunos de nuestros pacientes. Me preocupaba la anestesia, ya que tiendo a marearme fácilmente. También me inquietaba cuánto dolor sentiría después de la cirugía.
Pronto me encontré prestando especial atención a nuestras propias pacientes que llegaban con tipos de cuerpo y preocupaciones similares a las mías. Las observaba durante el proceso quirúrgico y realmente me “conectaba” cuando estas mujeres regresaban para su primera cita postoperatoria. Paciente tras paciente regresaba a nuestra oficina con enormes sonrisas y una gratitud y alegría por su figura renovada. Las veía radiantes y escuchaba comentarios como “¡Estoy encantada!” o “¡He recuperado mi cuerpo!” o “¡Me siento mucho más femenina y completa ahora!”
Básicamente, veía personas que me hacían pensar en mí misma. A menudo comentaban lo mucho que desearían haber hecho esta cirugía antes, en lugar de esperar tanto tiempo. Simplemente me di cuenta de que, “lo que ellas tenían, yo realmente lo quería ahora”. Era mi momento. Ya había terminado de comprar “sujetadores de talla grande”. Así que, con toda la confianza que pude reunir, un día entré a la oficina de mi jefe y le pregunté a Charlie si podía hacerme el Laser Bra y la cirugía de implantes Gummy Bear para mí.


Bueno, primero, si tiendes a estar nervioso por estas cosas como yo, olvida eso por un momento y prepárate para emocionarte. ¡Toma esa energía nerviosa y canalízala en entusiasmo! Veo mis fotos del “antes” y no puedo creer que haya esperado tanto. Ahora finalmente puedo usar vestidos sin sujetador, y estoy orgullosa de cómo me veo en bikini.
Lo más importante es tener a alguien de confianza que te ayude en casa; serán tus únicas manos durante unos días. Mi novio hizo esto por mí. Preparaba mis comidas, alimentaba a mi familia de tres perros y dos gatos, traía mi medicación; fue simplemente excelente. Si no tienes a alguien que pueda quedarse contigo, el personal de Marina Plastic Surgery puede hacer los arreglos para que vayas a un centro postoperatorio. Es sumamente importante contar con una persona confiable que esté contigo después de la cirugía. También debes preparar tu casa con anticipación. Quería que mi cama tuviera sábanas limpias y muchas almohadas, ese tipo de cosas. Me aseguré de tener bolsas de hielo en el congelador y comida saludable para los próximos días.
Esperaba que la cirugía fuera extremadamente dolorosa. Aunque Charlie me aseguró que estaría cómoda, tenía mis dudas. Sin embargo, me llevé una grata sorpresa; Charlie tenía razón, estuve muy cómoda gracias a los analgésicos que me dio la enfermera. Llené mi receta antes de la cirugía y me aseguré de tener también analgésicos de venta libre. Solo tomé la medicación recetada por unos pocos días, luego la reduje a solo por la noche para ayudarme a dormir. También tuve algo de inflamación esperada que se sentía como una ligera presión en el pecho. Las bolsas de hielo ayudaron muchísimo.
Descansé en cama la mayor parte de los primeros días, principalmente porque la medicación que tomé me hacía sentir sueño. Después de unos días me levanté y empecé a moverme, y regresé al trabajo en una semana.
No, no sentí náuseas en absoluto.
Me recuperé lo suficiente en una semana para jornadas de trabajo ligeras, pero noté que me sentía más cansada de lo habitual al final del día. El Dr. Stevens me dijo que esto era normal. Sentí una gran diferencia al llegar a las dos semanas. Mi energía realmente comenzó a regresar.
Es un proceso. Alrededor de tres a cuatro semanas, la mayoría de las personas probablemente pueden ir de compras para ropa nueva y realizar otras actividades que no requieran esfuerzo. Es probable que también puedas comenzar a dar caminatas cortas en ese tiempo. Debes esperar para retomar los entrenamientos regulares en el gimnasio y levantar peso pesado hasta aproximadamente la sexta semana.
Para ser completamente honesta, no pensé en complicaciones. Trabajando aquí en la oficina, he visto a muchas pacientes pasar por sus experiencias. No me preocupé porque no vi que ocurriera nada con nuestras pacientes que me inquietara. Obviamente, las instrucciones preoperatorias y los riesgos potenciales me fueron explicados, tal como se hace con cualquier paciente. Me sentí preparada y bien informada sobre posibles complicaciones, pero a la vez completamente cómoda. Como conozco de primera mano el alto nivel de experiencia y profesionalismo que ofrecemos aquí, simplemente no pensé en complicaciones.
Prepárate para la cirugía pensando en lo que necesitarás después. Ten a alguien listo para llevarte a casa y asegúrate de que tu hogar se sienta acogedor cuando regreses. Ten a alguien dedicado a ayudarte durante unos días. Asegúrate de poder tomar alrededor de una semana libre del trabajo. Llena tus recetas con anticipación. Una vez en casa después del procedimiento, sigue las indicaciones de tu doctor. Toma tus medicamentos y usa bolsas de hielo, si te lo recomiendan. Y aunque te sientas bastante bien, descansa mucho. Aunque te sientas bien por fuera, recuerda que no estás completamente recuperada por dentro, así que no te exijas demasiado. Permite que tu cuerpo se recupere por completo internamente antes de asumir cualquier esfuerzo intenso o salir corriendo a mostrar tu nuevo cuerpo en Hawái.
Lo mejor que puedes hacer es elegir sabiamente a tu médico y la clínica. Necesitas un cirujano plástico experimentado y un anestesiólogo M.D., además de colegas que estén contigo en cada paso para garantizar que te sientas cómoda y segura. Aunque trabajo aquí, puedo decir honestamente que no confiaría en ningún otro lugar. Realmente nos tomamos el tiempo de conocer a nuestras pacientes como individuos para asegurarnos de que se sientan informadas y tranquilas.
Recomendaría enfocarse en lo bien que te sentirás por dentro cuando tengas el cuerpo que deseas. Este es un momento en tu vida en el que estás haciendo algo para ti misma. En lugar de preocuparte demasiado, disfruta la experiencia y espera con ilusión los resultados.
Cada día veo a pacientes entrar a la consulta con expresiones de preocupación y salir riendo y llenas de emoción. El Dr. Stevens no solo es un cirujano hábil, sino que también tiene la capacidad de relacionarse con sus pacientes y comprender sus objetivos y temores. Sé que nuestras pacientes terminan sintiéndose como parte de la familia aquí. Nos llaman para contarnos que se van a casar, que esperan un hijo, o cualquier otra noticia importante.
No te sorprendas si alguien cercano a ti no está a favor de tu cirugía. Mi novio dijo que le gustaba tal como era y se preocupaba por las mismas cosas que yo. No quería verme sufrir. Solo recuerda que nadie más que tú vive tu vida. No saben cómo te sientes respecto a tu cuerpo ni cómo esos sentimientos te afectan. Una vez que comprendan lo que tu procedimiento realmente significa para ti, cambiarán de opinión. ¡Mi novio está encantado de verme tan feliz!
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